Actividad solidaria en el Día del Niño

La celebración del Día del Niño en Connections Cayalá fue mucho más que actividades divertidas para nuestros alumnos. Gracias al apoyo de los padres de familia, al entusiasmo de los niños y la cultura solidaria que se vive en Colegios APDE desde temprana edad, tuvimos la oportunidad de alegrarles el día a niños de escasos recursos con regalos.

La preparación del proyecto solidario comenzó mucho antes, desde el Mercadito Chapín, donde, con la venta de comida típica, toda nuestra comunidad trabajó para recaudar fondos y comprar los detalles para los niños necesitados.

La cultura solidaria nos inspira

En Colegios APDE la solidaridad se vive como una cultura. Por eso no vamos más allá de una recaudación e involucramos activamente a nuestros alumnos en el proyecto. Para la celebración, nuestros niños, tanto en Playhouse como Preschool, fueron los encargados de decorar una bolsa y elaborar una tarjeta para acompañar el regalo.

Luego, en familia envolvieron el regalo, prepararon una refacción y se lo entregaron a un niño con necesidad.

El que nuestros alumnos tengan contacto con otras realidades del país los ayuda en su proceso de maduración afectiva y crecimiento interior. Fomentamos la empatía, el desinterés personal y la alegría de entregarse a los demás.

Inauguración y bendición APDE Connections Cayalá

Colegios APDE es una asociación de ocho colegios con la misión de transformar la sociedad a través de la familia. Estamos comprometidos con una educación trascendente, libre, solidaria y responsable para un mundo global. 

Tras seis años de investigación y observación de las mejores prácticas innovadoras de los modelos educativos de Finlandia, España, Estados Unidos, México y Perú, contamos con un programa propio: Connections. El pasado 6 de julio, inauguramos APDE Connections Cayalá, la cuarta preprimaria de Colegios APDE. 

Se realizó la bendición de nuestras instalaciones a cargo de Pbro. Carlos Young, Vicario Regional del Opus Dei; también contamos con la presencia de autoridades de la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia y con familias que confían en nuestro programa.  

La preprimaria está situada en el edificio C, Lirios de Cayalá, y nuestro horario de atención es de 7:30 de la mañana a 4:30 de la tarde.  

Nuestras nuevas instalaciones permiten que los niños de 6 meses a 7 años tengan acceso no solo a una educación diferente, sino a todo un ecosistema que les dará la oportunidad de aprender en todo momento.   

También brindamos a los padres de familia herramientas educativas y formativas para que ayuden a sus pequeños a vivir como ciudadanos de bien. Todos nuestros alumnos reciben formación humana, espiritual, de doctrina católica y virtudes. 

En APDE Connections Cayalá estamos listos para recibir a tu familia y ser los mejores aliados para la felicidad de tus hijos. ¡Te esperamos! 

Colegios APDE: Educación presencial y segura

En la pandemia implementamos la educación virtual; sin embargo, la reapertura de los colegios es una necesidad. La presencialidad es fundamental para la eficacia del aprendizaje.

En Colegios APDE redactamos una guía para las familias y los profesores con las medidas de prevención del covid-19. Este documento fue revisado a detalle y se mantiene en constante actualización según las indicaciones de las autoridades de salud y del Ministerio de Educación (Mineduc).

En Colegios APDE, nos adelantamos

Queríamos estar listos para cuando fuera posible reabrir los colegios, así que desde octubre del 2020 compartimos con los padres de familia el manual Back to School. El tener una guía previa, estudiada y colegiada, nos permitió que, al recibir los protocolos del Mineduc, fuera más sencillo contrastarlos y ajustarlos. 

Por otra parte, readecuamos las instalaciones: distanciamiento de escritorios, ventilación, plan de limpieza minuciosa y frecuente, instalación de lavamanos y estaciones de desinfección, señalamiento de pasillos y otras áreas de estar, etc.

El compromiso y la concientización de la responsabilidad de cumplir los protocolos, tanto por parte de las familias como del colegio fue indispensable para que el regreso fuera seguro.

Nos importa la salud física y mental

Colegios APDE conformó el Comité de Gestión de Riesgos, integrado por personal capacitado para llevar todo el control y registro de cualquier evento que pueda afectar la salud de nuestra comunidad.

Contamos con un médico que nos asesora, capacita permanentemente y a quien podemos acudir en caso de dudas.

También nos interesa la salud emocional de todos. Hemos capacitado a los docentes para atender adecuadamente a los alumnos y hemos puesto a disposición de las familias el servicio de Family Counseling.

En Colegios APDE cuidamos esmeradamente todo lo que contribuya a proteger su salud de nuestros alumnos, de forma integral.

María del Carmen de Camey l Directora General de APDE Entrevalles l Especialista en Asesoramiento Familiar l Administradora de Instituciones

Cinco razones por las que vale la pena la presencialidad

Evitar el tránsito, las mañanas atareadas, las comidas a la carrera y más tiempo en familia. El recibir clases de manera remota ha traído beneficios; sin embargo, la presencialidad es insustituible.

Es necesario aclarar que las razones pueden variar según la edad del niño, el ambiente en casa y los objetivos familiares. A pesar de ello, estas razones son innegables: 

1.Desarrolla destrezas socioemocionales: El aprendizaje de un alumno no se limita a las matemática o el inglés, cursos que pueden tomarse desde casa.

Dentro de un ambiente escolar presencial los niños aprenden cómo integrarse en un grupo, sentirse parte de él, aprenden de los demás, aceptan que existen personas diferentes y desarrollan virtudes.

Aunque esto se inculca en casa, el desenvolvimiento de un estudiante no es el mismo cuando está fuera de su ambiente familiar, por lo que el colegio es clave.

2.El cambio de ambiente mejora los aprendizajes: Cuando hacemos una pausa para comer o pasamos de una actividad a otra, el cerebro y el cuerpo se preparan para la siguiente tarea.

Que un niño se traslade a su centro educativo lo prepara para su aprendizaje. Separa tiempo de familia, de amigos, o de recreación, por lo que puede aprovechar más cada actividad. Además, existen muchas actividades deportivas, culturales, espirituales que son valiosas y más aún cuando se realizan en ambientes propicios para ello.

3.Desarrollan y fortalecen hábitos y rutinas: Existen muchos hábitos que se aprenden en casa y, ¡qué mejor lugar para ponerlos en práctica o afianzarlos que en el colegio!

Es un ambiente donde no están los padres o hermanos, por lo que, de manera individual, pueden aplicarlos. Además, en el colegio, los horarios y las rutinas que se desarrollan son un gran complemento para lo que se enseña en casa.

4.Tienen contacto con otros niños, con otros estudiantes y con otros adultos: El ejemplo es y será siempre una gran manera de aprender. Tener contacto con otros adultos que pueden guiar y formar es invaluable. En un centro educativo, los niños consolidan sus amistades, lo que difícilmente pueden hacer vía remota.

No es lo mismo mantener una amistad en línea que cultivarla desde cero. Solo en la presencialidad se puede conocer a una persona de verdad y el colegio es el mejor lugar para hacerlo, pues es un ambiente propicio para ello.

5.Padres siendo padres, maestros siendo maestros: Darles a nuestros hijos el espacio para aprender en un ambiente donde no es papá y mamá quien enseña, es una gran oportunidad. Los maestros se han preparado, tienen vocación y se especializan según las etapas de desarrollo.

Ambos roles son importantes y complementarios. Algunos niños tendrán la suerte de tener padres de familia muy entusiasmados y preparados para cumplir con ambos papeles, pero, en general, es mejor diferenciarlos.

No podemos negar que la persona no solo es inteligencia y necesitamos formarla integralmente. ¿Qué pasaría si cultivamos muchísimo la inteligencia y dejamos de lado la voluntad, corazón, temperamento, sus hábitos y todo lo que nos define como personas?

Aunque podemos aprovechar la tecnología para mejorar nuestra educación; en edad escolar, la presencialidad, nunca será sustituible por la virtualidad.

Mi hijo llora cuando lo dejo en colegio, ¿cómo puedo ayudarlo?

La adaptación al colegio es un proceso por el que todos los niños pasan. Puede darse al iniciar un nuevo ciclo escolar, al empezar la preprimaria, la primaria, al volver de un periodo de descanso, o por un cambio de colegio.

En algunos niños es un proceso natural que se da con facilidad, otros requieren mayor apoyo para poder lograrlo. A partir del inicio de la pandemia y las clases virtuales, puede que este proceso se haya vuelto un poco más complejo.

Los niños permanecieron mucho tiempo en casa y están saliendo de su zona de confort, donde deben adaptarse a un nuevo ambiente, nuevos compañeros y nuevos maestros.

¿Cómo ayudarlos si lloran cuando lo dejan en el colegio?

1. Transmítele mucha seguridad y confianza: Los niños necesitan reconocer que están yendo a un lugar y ambiente seguro. Si los padres muestran inseguridad, los niños se sentirán inseguros.

Lo recomendable es mostrarse alegres, hablarles sobre las actividades y juegos que realizarán en el colegio, y dejarles claro que mamá y/o papá regresarán por la tarde a recogerle.

2. Al salir del colegio, pregúntales cómo les fue, cómo estuvieron o qué hicieron: Muestra un interés genuino y alegre por lo que le sucede dentro del colegio, por los amigos con los que comparte, etc.

Esto les ayudará a reconocer que, aunque están separados por un periodo, se interesan y se alegran por las anécdotas que tienen. Además, el tener esta práctica promueve una comunicación positiva entre padres e hijos.

3. Evita llegar al colegio con prisas: La despedida se volverá presurosa y eso provocará la sensación de abandono de los padres. Procura preparar lo necesario con tiempo, de manera que la mañana sea tranquila y se eviten emociones negativas.

4. Hazlo parte de la preparación de sus materiales: Cuéntale qué lleva en su mochila, qué lleva en su lonchera, de manera que sienta que está preparado y que nada le hará falta.

5. Sé detallista: Comparte dentro de su lonchera mensajes positivos que le ayuden a sentirse seguro y tranquilo. Si aún no sabe leer, colócale caritas felices o corazones que pueda interpretar y cuéntale que tú se lo enviaste.

Si el llanto surge a mitad del ciclo, sin haber tenido algún suceso relevante que lo haya causado, busca mantener una comunicación positiva para saber si hay algo que esté afectando su bienestar.

Comunícaselo tu asesor familiar o personal de tu hijo, para darle seguimiento internamente y se pueda encontrar la razón que lo provocó.

A algunos niños les tomará más tiempo, pero lo más importante es mantener la paciencia, persistir en las estrategias que se implementarán y apoyarse en el colegio y asesor para dar un acompañamiento integral y personal.

Michelle Guerra de Cotero l Psicopedagoga l Máster en Asesoramiento Educativo Familiar l APDE Las Colinas